Criticas

Crítica

Los ritmos del color
La producción del artista argentino Lavatelli se centra en una singular representación del mundo exterior, revisada según su propia interpretación. La codificación de ciertos momentos de la vida se convierte para él en un estilo «cromático» para narrar, por medio de diferentes síntesis y fragmentos de momentos, casi fotográficos, las propias emociones.
El lenguaje de Lavatelli es fuertemente conceptual y áulico. Sus trabajos se caracterizan por el uso del acrílico, técnica que le permite habilmente capturar la velocidad del trazo y las superposiciones tonales. Orienta su estudio para alcanzar armónicas sucesiones en un ritmo que parece pulsar, y que es visivamente perceptible. Utiliza todos los colores en perfecto equilibrio, euritmos y proporciones. El negro (que evidencia la silueta y el perfil de lo que retrata, deja una fuerte impresión en los trazos del dibujo), es la base de la composición. En las figuras se contraponen así en sucesión, trazo sobre trazo, diferentes tonalidades hasta llegar a efectos blancuzcos, que se destacan con su luminosidad en toda la escala cromática.
El artista trata temáticas sociales, en las cuales aparecen las siluetas humanas, retratadas en el contexto de sus comportamientos y de las vivencias que le suceden. Son obras que tratan de temáticas actuales y sociales, de la noche, de la música, de melodías y, además, de la suerte y la locura. Expresa la alegría y la desolación, además de las emociones que regulan la vida humana con sus miedos y esperanzas.
Expresa constantemente la idea de la unión y la fuerza del grupo: sus personajes son representados en ceremonias, reuniones, en relaciones sentimentales y en momentos de la vida intensamente vividos. Este sentido de unión, se manifiesta también en protagonistas de sus pinturas: es el caso de Adán y Eva, o en Los mareados, donde el trazo del color busca la forma y las connotaciones. Se obtiene así el resultado de un exuberante artificio visivo, donde el color se vuelve forma y la forma se vuelve color. La compenetración de los colores está dada además, por medio de la superposición de lejanas y disonantes tonalidades.
Lavatelli expresa de la mejor manera su arte por medio de contrastes armónicos: a través de la colectividad, nos habla del hombre común, y a veces de sí mismo o de las emociones por él vividas. El emblemas es justo la obra Todos para uno, donde se expresa al máximo el sentimiento de estos invisibles vínculos: cada personalidad es superpuesta y comunicante, como las teclas de un piano, cada una de ellas con la propia voz.
El artista vive y trabaja actualmente en la ciudad de Vicenza, desarrollando una dinámica e incesante fase de experimentación.
Rosi Raneri, crítico de arteEnero 2011
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Decidido, irónico, transgresivo y algo grotesco. Y sin embargo realista, dramático en el trazo y la intensidad de sus retratos. Melancólico, lo suficiente como para despertar emociones. Reflexivo y original, además converge en toda  su obra algo de las corrientes estilísticas contemporáneas. En una palabra: fantástico!


Ingrid  Strain - Julio 2010
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FERNANDO LAVATELLI, HACE QUE EL SENTIDO ABTRACTO DE LAS PALABRAS, MAGIA Y BELLEZA, TENGAN REPRESENTACION, Y ESO ES LO QUE REMITEN OBSERVANDO LAS OBRAS DE ESTE DINAMICO ARTISTA, QUE MUESTRA LA ARMONIA DE LAS FORMAS Y LOS COLORES, EN LOS GRUPOS ESTILIZADOS. SUS FIGURAS ENIGMATICAS DONDE LOS ROSTROS SE ADIVINAN, SIGUIENDO LOS BRIOS DEL PINCEL.
TODO SE CONJUGA CON EL EXCELENTE JUEGO, EN QUE BALANCEA EL COLOR Y LA ESTETICA DE LA GEOMETRIA DE LOS ESPACIOS.

-Martha Efrom – Escritora y artista argentina
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Al limite de lo informal Fernando Lavatelli pintor en su cromatismo suelto y de fuertes contrastes expresa un lirismo muy sugestivo, que revela en el espacio de la tela el universo escénico y poético en el que el artista en un dinamismo de formas complejas compone una expresión original y de fuerte impacto emotivo. Inspiración de su productividad artística efervescente mediante el uso prepotente del color en una pintura emocionante que revela una cautelosa sustracción, una suspensión alusiva de la imagen hacia una abstracción simbólica.

Paola Sgarbazzini – Agosto 2
010